El domingo ante Puebla, Vincent Janssen se llevó el abucheo del BBVA por primera vez desde que llegó a Rayados.
El holandés llegó con un crédito pocas veces visto en la afición rayada y al parecer el domingo ese ‘encanto’ se rompió.
La falta de contundencia y de ritmo exhibidas, fueron duramente criticadas por el único juez que le debe importar: el aficionado.
En los últimos años la gente rayada se ha vuelto estricta y medita mucho a quién entregarle su ‘corazón’.
Con todo y sus 121 goles y su destacada actuación en la Selección, hay quien aún no considera a Funes Mori un ídolo a la altura del olimpo rayado.
Sin embargo, desde que Janssen llegó ha sido arropado por los incondicionales.
Aun así, el europeo sólo ha dado destellos del talento que lo llevó a ser fichado por el Tottenham.
En poco más de 2 años, acumula apenas 12 goles en Liga MX y 2 asistencias, números muy bajos dadas las expectativas.
Destellos en Liguilla y festejos efusivos son lo que lo habían mantenido a salvo del juicio de la afición hasta ahora.
Este domingo pinta para que repita como 9 en la delantera rayada.
El que en la jornada 1 el Vasco haya preferido darle minutos al Plátano que mantener a Vincent en la cancha es ya una señal de preocupación.
Contra Pumas Janssen deberá esforzarse por conseguir el gol y ser relevante en el equipo, conectarse con sus nuevos compañeros, Duván y Campbell y demostrar que tiene con qué pelear la titularidad en un ataque lleno de nombres.
Urge que la delantera albiazul responda y logre un triunfo contundente que calme un poco las aguas que comenzaron a agitarse desde la eliminación con Santos.
Mientras tanto, a más de 600 kilómetros de distancia, a punto de jugar otra Final, el Mellizo seguramente estará durmiendo tranquilo sabiendo que su puesto titular en el equipo está seguro.