Por Marianela Camelo | Twitter @manecamelo
El Volcán no se cansó de gritar goles en el partido vs. Necaxa. Sabían que había oportunidad para gritar aún más porque las Amazonas seguían intentando ir hacia adelante, a pesar de ya llevar 8 goles en su cuenta. Para una afición que por años pedía a su contraparte varonil que fueran al frente, Tigres Femenil es aquello con lo que sueñan todos los hinchas al futbol: un equipo ofensivo, que gusta, que siempre tiene hambre, sea quien sea el rival, sea cual sea el juego.
Roberto Medina tiene ante él una baraja completa de jugadoras que tienen ese olfato goleador y forma parte de su identidad como futbolistas. Jugadoras que tienen siempre la vista hacia adelante, y que ven en la portería oportunidades: para anotar, para ganarse un puesto en el once titular, para seguir creciendo futbolísticamente. Al final de cuentas, entienden que no solamente a eso se dedican y esa es su posición en la cancha, sino que personalmente crea una sensación tan increíble que la quieren revivir una y otra vez.
Para un equipo que tuvo algunos problemas de contundencia las temporadas pasadas (y aun así se llevaron el bicampeonato), es importante no solo crear oportunidades, sino también encontrar puerta constantemente. Y sí, es una exigencia enorme, pero si se pide eso de ellas es porque han demostrado que tienen para eso y mucho más. Nadie duda de sus capacidades, de sus logros y de lo que les queda por escribir. Las barreras se han derrumbado para construir su legado.
Solo es la jornada 3, y la pregunta con la que me quedo es…
¿Veremos al Tigres más goleador de su historia? Yo creo que sí.