Cuando se anunció la llegada de Miguel Herrera al equipo de Tigres, los aficionados se imaginaron un montón de cosas.
Los negativos asumieron que habría muchos goles a favor, sí, pero que a cambio recibirían otros tantos.
Los positivos juraban que el equipo volaría desde el primer momento; algo muy parecido a lo que ocurrió con Nery Pumpido por allá del 2003, cuando sustituyó a Ricardo Ferretti y no solo llevó a los felinos a disputar la final de aquél invierno, sino que mostró un juego espectacular que enamoró a propios y a extraños.
Ambos dieron por sentado que los principales perjudicados con el cambio iban a ser los defensores, puesto que venían acostumbrados a un estilo completamente diferente al pretendido por el Piojo.
Los de medio campo también la van a pasar mal, auguraron algunos… y acertaron.
Sin embargo, todos daban por seguro que mientras se acoplaban en lo defensivo, el equipo se iba a ver bien en la ofensiva… y no.
La principal deuda de Miguel Herrera con este Tigres, no tiene nada que ver con los resultados obtenidos hasta el momento.
Cuatro puntos de nueve posibles son pocos, sí. Pero si tomamos en consideración que hubo dos visitas (una de ellas a Toluca… al medio día), dos expulsiones en dos partidos distintos y que no se ha contado con cuadro completo, medio podemos entenderlo.
No aplaudirlo ni solaparlo, ojo. Solo entenderlo.
No obstante, lo que preocupa es que en estos tres encuentros de Liga sus picos altos no han sido tan altos, y los bajos si han sido muy… pero muy bajos.
Lo de la defensiva ya medio se tenía presupuestado.
¿Pero a la ofensiva?
¿Realmente han visto a un Tigres avasallador?
Contra Santos en la segunda mitad, capaz. Pero con más corazón que fútbol.
Se entiende que Tigres está en transición; que tardarán en brillar como corresponde.
El detalle acá es que en el trance se cuenta con material suficiente para no pasarla tan mal.
Que se pueden generar más jugadas al frente y concretarlas, para así medio equilibrar la balanza y que los errores defensivos no salgan tan caros.
Tigres enfrentará al Puebla esta noche, en punto de las 19:00 hrs, y todo parece indicar que Miguel Herrera volverá a mover sus piezas en busca de que los suyos ya le regalen aunque sea noventa minutos de buen fútbol.
Los once elegidos, al parecen, serán…
¿Podrá Tigres al fin darle una alegría a su gente?
¿Cómo le va a ir a Javier Aquino como lateral por izquierda?
¿Rafael Carioca y Juan Pablo Vigón lograrán entenderse en el medio campo?
¿Aprovechará Leo Fernández arrancar como titular?
¿Luis Quiñones y Diente López surtirán de balones a Carlos González?
¿El Cocoliso aprovechará las oportunidades que se le presenten?
¿Florian Thauvin tendrá minutos?
¿Podrá Miguel Herrera saldar la cuenta que tiene pendiente con el equipo de Tigres, y al fin darle a sus aficionados un poquito de esos ‘chingos de goles’ que supuestamente iban a anotar?
Veremos qué sucede…
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