Después de lo inesperado, de los marcadores sorpresas en las semifinales de ida, e incluso, después de unos primeros minutos atípicos, Tigres y Monterrey han recobrado la versión que se esperaba de ambas escuadras en liguilla.
Si quedaba alguna duda, Nuevo León es la capital de futbol femenino en México pues, una vez más, será sede de la gran final. Aunque Alison González amenazó la fiesta regiomontana, Rayadas logró dar la vuelta al marcador durante la segunda mitad del encuentro. El equipo de Eva Espejo no desistió tras el gol en contra, sino por el contrario. En el segundo tiempo, aumentó la intensidad y afinó la puntería para, en apenas diez minutos, empatar el marcador. Sin embargo, pese al gol de Burkenroad, el global se mantenía en favor de las rojinegras. De esa manera, la última media hora de tiempo corrido, se convirtió en una lucha entre la resistencia de Atlas para soportar el ataque, y la intensidad de Rayadas para no ceder. Eventualmente, Monterrey, terminó imponiéndose, gracias al gol de Evangelista al 62’, que dio a Espejo su primer triunfo en la presente liguilla.
Como un paréntesis, el último partido de Atlas en el Apertura 2021 ha dejado una dura interrogante: ¿Habrá sido este el último partido de Alison vestida de rojo y negro? Ciertamente, la pregunta lleva algún tiempo repitiéndose pero, en esta ocasión, exsite ya la fuerte creencia, incluso deseo, de que a la joven promesa le empiezan a salir alas. Por ahora, nada se ha confirmado, excepto el deseo de Alison de seguir creciendo e impulsar el futbol femenil en el país. En este sentido, esta última declaración sería el único indicio de que, en caso de salir del cuadro tapatío, sería otro equipo mexicano su destino.
De vuelta a las semifinales, en el Universitario, las dudas se filtraron en la afición cuando, después de 45 minutos, América mantenía el empate que le permitía avanzar a otra final. No obstante, apareció la capitana, la recién reconocida como mejor futbolista de la temporada pasada, Liliana Mercado, quien a balón parado dio un golpe de realidad – nunca mejor dicho – al partido. Minutos más tarde, Mayor derrumbó la ventaja conseguida por las Águilas en el Azteca, lo que dejó a un América vulnerable. Entonces, apareció María Sánchez para concretar la obra. Dos goles de la número ‘24’ para abrir la puerta al tricampeonato. Además, en la estadística, ahora queda el registro de tres victorias por cuatro goles para las Amazonas, que en esta liguilla solo saben ganar por goleada.
Quinta edición de la Final Regia, con Monterrey soñando en conseguir esa segunda estrella, y Tigres buscando completar esa primera “manita” de cinco título. En el campo, la realidad muestra a las Amazonas como favoritas; contundentes, veloces y constantes. Mientras, a Rayadas, le salva este último partido, en el que ha mostrado una versión más perseverante, ordenada y ambiciosa. En cuanto a los números, Monterrey cuenta, especialmente, con dos estadísticas poco optimista. Hablando de lo colectivo, existe un balance de tres victorias por una derrota a favor de Tigres en finales. En tanto, en lo individual, se trata apenas de la segunda final de Eva Espejo al frente de un equipo, con un subcampeonato en el registro. Es verdad que, las estadísticas se rompen pero, con esto en la cabeza, la balanza parece moverse ligeramente de un lado antes de que ruede el balón.
Pese a soñar con una final inédita, no podemos negar que, tener a los dos mejores equipos del torneo resulta siempre un espectáculo. Además, en esta ocasión, da la impresión de que, pese a los números, la diferencia entre ambas platillas es mínima. Razón para ilusionarse y dejarse envolver en el juego.