Por: Adriana Espinosa
Para una gran parte de la afición blaugrana, los signos de interrogación estarán de más. Después de la exhibición del Barcelona ante el Wolfsburg (5-1), parece que las catalanas tienen ya asegurado su boleto para la final en suelo italiano. Sin embargo, está no es la primera vez que las Wölfinnen se encuentran contra la pared en esta temporada de Champions. Recordemos que, en la fase clasificatoria, el Wolfsburg venció en penales al Bordeaux, lo que le permitió formar parte de la fase de grupos. Misma instancia donde, hasta la última fecha, el conjunto alemán parecía eliminado, evitando aquella decepción con un cuatro a cero sobre el Chelsea. Por esta razón, no podemos negar la alegría de las culés, pero tampoco podemos anticiparnos a un equipo como el que dirige Tommy Stroot.
Igual de cierto es que, el once de lujo con el que arrancó el Barcelona, ha desplegado un juego inverosímil. Línea por línea, el Barça ha hecho un partido casi perfecto, salvo por el único tanto recibido. Mapi León ha salido cual fiera a defender el territorio blaugrana, apretando a las rivales y ganando casi todos sus duelos. Lo mismo que Paredes, quien además ha salvado al cuadro catalán con una lectura de juego excepcional, anticipando el tiro de Huth. En el medio campo, tanto Patri como Aitana han hilado una serie de pases precisos, tejiendo un juego con el sello de la casa, de posesión y velocidad. Quizá un tanto de manera injusta, Alexia Putellas ha sido nombrada la MVP del encuentro pero, si la “Reina de Catalunya” marca dos tantos y suma gestos de fantasía en un mal partido, cuesta mucho argumentar que no haya sido trascendente su participación pues, en mayor o menor medida, siempre lo es.
En su lugar, la plantilla del Wolfsburg saldrá de Barcelona con más dudas que aciertos pues, aunque se ha hecho notar su gran estado físico, las alemanas también han cometido una gran serie de errores. Una vez conocidas las alineaciones, anticipábamos lo que podía sufrir Wedemeyer en al zona baja del campo, y vaya sí lo ha hecho. Al igual que, Rauch, que tendrá pesadillas con Hansen, a quien fue incapaz de detener pese a la regular actuación de la noruega. Al ataque, ninguna de las dos referentes, ni Wassmuth, ni Huth, han podido marcar, con pocas oportunidades y balones favorables en el partido. Solo la islandesa, Sveindís Jónsdóttir, ha buscado encarar a las jugadoras blaugranas, aunque sin ningún éxito. Una falta de argumentos para creer que la remontada es imposible pero, con un gol de Roord al cual aferrarse, además de su reciente historial en la competición, descartar a las cinco veces finalistas sería soberbio.
Finalmente, si de récord hablamos, todos corresponden al Barcelona, quien celebra su primera victoria en cuatro enfrentamientos contra el Wolfsburg. Además, el equipo de Giráldez empata al Frankfurt como el segundo equipo con mayor número de partidos sin derrota en Champions, solo por detrás del Lyon. Por supuesto, ninguno tan remarcable como los 91 mil 648 personas que, en menos de un mes, han roto su propio récord de mayor asistencia a un partido de fútbol femenino. Porque desde España el mensaje es claro: de aquí en más, todos los pasos deben ser hacia adelante, con miles de aficionadas y aficionados sumados a la fiesta del balón.