‘Les pido un poco de paciencia’, dijo Diego Cocca hace unos cuantos días, luego de que Tigres fracasara en la Copa SKY.
¿Que no era un torneo importante?
Es verdad…
¿Que no podemos matar al entrenador por 4 partidos de preparación?
Es cierto, es cierto…
Como real también es el hecho de que Tigres mostró muy poco fútbol en dicha competencia, y aunque aún queda mucho camino por recorrer, la falta de ideas y contundencia son cosas que no se pueden esconder.
No le tengamos miedo a la palabra: FRACASO
Lo normal en el fútbol y en la vida, como diría alguna vez Marcelo Bielsa (palabras más, palabras menos), es fracasar.
‘Ganar es algo raro’, le escuché decir algún día a don Mario Castillejos Valle, que en paz descanse.
Y ambos están en lo correcto… me parece.
Son más las veces que las cosas no salen como las deseamos. Por eso triunfar sabe tan bien, porque es la excepción a la regla.
Partiendo de esto, entendamos que el fracaso es algo natural en el mundo del fútbol.
Algo contra lo que debemos luchar, sí. Pero parte de la lucha es aceptar cuando las cosas salen mal.
Aceptar para aprender y corregir, ojo, y con base en ello se medirá la paciencia que aficionados y medios le tendremos a Diego Cocca.
¿Que necesita tiempo para plasmar sus ideas?
Sí. Necesita tiempo… y se le dará.
Pero en ese tiempo se señalarán los errores y se aplaudirán las virtudes.
Y no hablo únicamente del resultado… aunque claro que el resultado importa, y mucho.
Yo me refiero, más bien, a las formas.
Puedes ganar un partido en el que jugaste horrible (como sucedió muchas veces con Miguel Herrera), y aunque todos los triunfos se celebran, cuando se obtienen sin saber cómo, hay más dudas que sonrisas, pues es difícil que algo así se repita.
En cambio, cuando pierdes un partido que dominaste y en el cual mostraste cosas interesantes, se lamenta la derrota, obvio, pero también se resalta lo positivo y se trabaja para capitalizarlo de una mejor manera.
¿Paciencia para Diego Cocca?
La respuesta dependerá del propio Diego.
Si Tigres va de menos a más a lo largo de la campaña, el técnico argentino tendrá cierto crédito.
Pero si pasan las jornadas y siguen siendo más las dudas que las certezas, aún y cuando, en algunas ocasiones, el resultado nos favorezca, habrá críticas, Diego.
Y críticas cada vez más fuertes.
Como fuertes serán también los aplausos en caso de que las cosas salgan bien.
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