Por: René Fernández | Twitter: @Renefdz
Las dos semanas que tuvo de trabajo de poco sirvieron con la expulsión de Luis Quiñones que le cambió todo el plan, aun así, el técnico de los Tigres, Marco Antonio Ruiz, confía en que los resultados positivos pronto llegarán.
“Por un lado te frustra que todo el trabajo de estas dos semanas que habíamos tenido para poder trabajar con el equipo se echa a perder por detalles, por errores puntuales también de nosotros pero por otro lado estoy contento en el tema de que los jugadores se rompen el alma, que los jugadores intentan hacer lo que uno les pide, que tienen amor propio y mientras tengan eso el fútbol va a tener aciertos y errores, tenemos que seguir insistiendo y yo no tengo duda que los resultados van a llegar”, declaró en conferencia de prensa.
Aún así, el “Chima” no lanzó ninguna crítica hacia el arbitraje.
“Le rompe la camisa a Luis Quiñones, no justifico por supuesto, ni voy hablar mal del arbitraje, ni estoy aquí para criticar, siempre hemos sido muy respetuosos y vamos a seguir haciéndolo, siempre y sencillamente lo aprecio de diferente manera y lógicamente hubiera condicionado al revés en partido pero aún así me gustó la reacción del equipo”, añadió.
El entrenador tamaulipeco dejó en claro que los objetivos siguen siendo los mismos, ganar el título de Liga y el de la Concacaf.
“Mientras tengamos posibilidades en los dos equipos este equipo va a buscar los dos torneos, al final seguimos en zona de calificación y sabemos lo que puede pasar en una liguilla, tenemos muchos años en esto. Por supuesto que queremos entrar de manera directa y todavía creo que tenemos posibilidades en es momento de apretar y de sumar”, finalizó.