POR: DIEGO DE MONTEMAYOR
Eduardo Vargas partió de Tigres y se llevó muchas cosas en su maleta: goles, campeonatos, recuerdos, amigos y lágrimas.
Ya sabíamos que le había costado despedirse de Tigres, pero no sabíamos que le había costado tanto hasta llegar hasta las lágrimas.
“Son cuatro años que estuve acá. La verdad que me voy muy triste y a la vez feliz porque es un paso para mi carrera y mi familia. Voy a extrañar mucho a esta ciudad y a mis compañeros, al personal de este club”
Eduardo Vargas
En un video difundido por el Club Tigres se ve al chileno con los ojos rojos y con un nudo en la garganta, lo mismo que vivió el lo provocó aquel fatídico 10 de diciembre del 2017 en el municipio de Guadalupe, Nuevo León.
Vargas ya había hablado ante los medios de comunicación en Monterrey y había expresado su dolor por salir de Tigres, aunque también estaba motivado por probar suerte en Brasil.
Ahora el chileno portará el número 10 en el Atlético Mineiro, equipo con el que fue presentado y ya entrenó.
