POR: CESAR VARGAS
No existe revolución ni evolución sin ideas.
Quien no genera ideas nuevas y valiosas está destinado a fracasar tarde o temprano. Y peor, quien sólo imita las ideas de otros está destinado a ser sólo una copia del otro.
Los Tigres se enfrentan al reto que todas las organizaciones humanas exitosas han enfrentado tarde o temprano: la renovación, el salto hacia un siguiente escalón en el desarrollo de su propia historia.
Muchos proyectos exitosos se han venido para abajo en esta fase. Es común también que en esta etapa los proyectos vivan horas de inestabilidad, como parte natural del desarrollo, y que muchos piensen que el proyecto ha caducado, cuando sólo se trata un período de transición.
Tigres tiene en este momento tres opciones en su horizonte, y las tres me parecen prometedoras: Mantener a Ricardo “Tuca“ Ferretti en el timón, pero con una evolución en su idea de juego (algo que está intentando aunque mucha gente no lo perciba así), o traer un técnico con ideas revolucionarias del extranjero (no cualquier técnico, sino alguien de prestigio).
La otra es contratar a un técnico que ya esté en el medio mexicano, pero con un análisis profundo para saber si sus conceptos en realidad son revolucionarios como para competir en el mercado global.
Cuando se habla de traer a un técnico de prestigio muchas veces se piensa que no conoce el medio y que terminará fracasando, pero muchos expertos atribuyen el progreso del futbol inglés a la llegada de nuevos técnicos con nuevas ideas a la Premier League. No hay que confundir, porque para que una idea revolucionaria progrese es necesario crear las condiciones en la cultura de la organización para que pueda desarrollarse.
La llegada Javier Aguirre a Rayados y de Santiago Solari al América, abonan al desarrollo de nuevos paradigmas.
Lo peor que pueden hacer en este momento los altos mandos de los Tigres es tomar decisiones sólo porque sean populares, porque la vida nos ha enseñado que muchas la mayoría no tiene la razón.
Dicen Stephen Covey, el fallecido gurú de los procesos organizacionales, que los grupos humanos atraviesan por cuatro fases: sobrevivencia, estabilidad, éxito y significado.
Con mucho esfuerzo los Tigres han alcanzado las primeras tres etapas después de décadas de fracasos, el siguiente paso es el significado, que se refiere a una contribución a la cultura del entorno.
Sigue a los Tigres generar ideas nuevas en nuestro futbol, porque es la única manera en que evolucionaremos, el ejemplo más claro es el Barcelona, cuya estilo de juego permeó para siempre a todo el futbol español, en especial a la Selección que conquistó dos Eurocopas y una Copa del Mundo.
Una mala decisión y se puede perder todo lo que se ha avanzado.
Compromiso con el desarrollo sobrevivencia, estabilidad, éxito y significado.