Imagina que tienes dinero para comprarte un Ferrari y cada dos años tienes para cambiar de modelo, sin embargo te gusta manejar un Tsuru modelo 95 que ya comienza a fallarle los frenos y que es muy gastón en gasolina ¿Si lo vieras desde fuera pensarías que eres una persona que no sabe invertir bien su dinero no? Pues tal parece que con Ricardo Ferretti así la la cosa.
Desde su llegada al cuadro felino se le ha reconocido por tener un sistema efectivo y que da títulos, pero en la mayoría de los torneos su especialidad no es ser espectacular a la hora de jugar.
Aunado a esto podemos decir que a la institución felina han llegado jugadores con buen cartel, pero que a la hora de la hora no terminan por despuntar o no “encajan” en el sistema del buen “Tuca”.
¿Es realmente la materia prima la que no funciona o es el entrenador que no sabe sacarle provecho?
Casos como el de Ismael Sosa, Lucas Zelarayán y recientemente Leo Fernández demuestran que el técnico, lejos de sacarle jugo a los suyos prefiere que se “pudran en la banca” y de vez en cuando hay que darle oportunidades.
En los 3 casos llegaron como figuras , sin embargo al pasar de los partidos la expectativa fue bajando hasta ser “un elemento más”.
En el caso de Sosa y Zelarayán llegaron como compras importantes, con un gasto fuerte y con un cartel interesante en sus anteriores equipo, mientras que en el caso de Fernández fue una inversión a futuro. Primero siendo prestado a diferentes equipos para que continuara con su nivel para luego destacar en el conjunto felino.
En los 3 casos la historia se repite. Minutos, oportunidades y de pronto ¡Nada! A esperar en la banca una chance para poder demostrar en 30 minutos que puedes hacerte cago del equipo.
¿Cambiará la historia con Leo Fernández o será una estrella más que quedó en promesa y no terminó por destacar en Tigres?
