Por Carlos Hinojosa
Este domingo, los Packers enfrentan su segundo partido en horario estelar de la temporada visitando a los 49ers de San Francisco en un capítulo más de esta reciente rivalidad. Cuatro de los últimos cinco encuentros entre estos dos equipos se han disputado en el Levi’s Stadium. Siempre han sido un desafío difícil para los Packers, que tienen un récord muy pobre en la costa oeste.
Los Packers ganaron en su último partido como visitantes contra los 49ers, una victoria por 34-17 en 2020. Sin embargo, los Niners sufrieron muchas lesiones y no contaron con algunos titulares importantes en ese episodio.
Ese no será el caso en el Sunday Night Football de esta semana. Green Bay enfrenta un desafío complicado contra San Francisco, con el equipo de Kyle Shanahan llegando al partido invicto con dos victorias de visitante en el inicio de su campaña.
Jugando este partido en casa de los 49ers, y en una semana corta, los Packers necesitarán estar en su mejor momento para evitar perder por segunda vez en sus primeros tres juegos de temporada regular. Pero ¿qué necesitan los Packers si quieren vencer a los Niners?
Utilizar a Aarón Jones.
Cuando la ofensiva de Green Bay ha estado en su mejor momento ha sido porque Aaron Jones ha estado imparable con el balón. Y para muestra, la semana 2 contra los Leones de Detroit, cuando Matt LaFleur se propuso darle el balón a Jones desde el principio y con mucha frecuencia. El corredor del sombrero tuvo 17 acarreos junto con 6 recepciones, acumulando 115 yardas totales y 4 touchdowns.
Los Packers abandonaron el juego terrestre demasiado temprano en la derrota de apertura de temporada ante los New Orleans Saints, algo que deberán evitar en el Levi’s Stadium, incluso si se encuentran abajo muy temprano en el partido.
La línea defensiva de San Francisco está entre las mejores de la liga, pero sus rivales han podido correr contra ellos en los dos primeros juegos de la temporada. Los 49ers están permitiendo 133.5 yardas terrestres por juego, ubicándose en el puesto 27 de la liga.
Esta será una gran prueba para los linieros ofensivos interiores de los Packers. Podría ser Jon Runyan (segundo año), comenzando junto a dos novatos, Josh Myers y Royce Newman. No es fácil, pero si los Packers pueden abrir carriles rápidos para Jones, tendrán todas las posibilidades de ganar este juego.
Proteger a Aaron Rodgers
Esta será la prueba más difícil de la temporada hasta la fecha para una nueva línea ofensiva de los Packers. Ya perdieron a dos All-Pros en David Bakhtiari (lesionado, en la lista de físicamente incapaz de participar) y Corey Linsley (quien firmó con Los Ángeles Chargers en la agencia libre). Ahora el Pro Bowler Elgton Jenkins, quien ha sido dominante como tacle izquierdo, está en duda para el domingo por una lesión en el tobillo.
A pesar de tener dos novatos titulares, la línea ofensiva de Green Bay ha ayudado mucho en lo que va de la temporada, pero tendrán que estar preparados para una fuerte carga de los 49ers, liderada por Nick Bosa y Arik Armstead. Si Bosa puede salirse con la suya (ya tiene tres capturas esta temporada), será un día largo para la ofensiva de los Packers.
Una forma de proteger a Aaron Rodgers será corriendo el balón y enfriando el pase. Establecer terceras oportunidades manejables y cansar a la defensa rival. Pero cuando se trate de jugadas de pase muy obvias, los cinco linieros de los Packers deberán mantenerse firmes y concentrados. Esta será una gran prueba. Si la línea ofensiva de Green Bay se mantiene fuerte, esta ofensiva podría tener cierto éxito, permitiendo a Rodgers demostrarle a San Francisco una vez más, por qué se equivocaron en no seleccionarlo en el draft de 2005.
Detener la carrera.
La defensa contra la carrera no ha sido el fuerte de los Packers en las primeras dos semanas por lo que Kyle Shanahan querrá correr el balón desde muy temprano y con frecuencia, dominar el tiempo de posesión y mantener a Aaron Rodgers fuera del terreno de juego.
Ha llegado la hora de que la línea defensiva de los Empacadores se intensifique y marque la diferencia en este juego. Los Packers están permitiendo 139.5 yardas terrestres por partido, la cuarta mayor cantidad de la NFL. Los Packers perdieron a lo grande ante los 49ers en ambos juegos de la temporada 2019. ¿Qué hay en común en ambos partidos? Que San Francisco se cansó de correr la pelota. Todos recordamos el juego por el título de la NFC cuando los 49ers corrieron para 285 yardas y cuatro touchdowns con Jimmy Garoppolo intentando solo ocho pases.
Sin embargo, esta vez hay una diferencia. Los 49ers han sufrido lesiones de sus corredores y podrían quedarse sin sus cuatro mejores opciones. Raheem Mostert estará fuera por el resto de la temporada. Elijah Mitchell, JaMycal Hasty y el novato Trey Sermon están todos en el informe de lesiones de esta semana. A pesar de eso, la ofensiva de Shanahan puede ser dominante en el terreno sin importar quién sea el corredor. No es ningún secreto que en la victoria de los Packers sobre los 49ers la temporada pasada, limitaron a San Francisco a 55 yardas por tierra. Imponer condiciones en la defensa desde temprano será clave para dominar el partido. Si la defensa de Green Bay no puede detener la carrera, el partido estará perdido.
Pronóstico: Green Bay +3