Por Jair López | Twitter: @JairLpez01
Este sábado, los Rayados de Monterrey visitaron la cancha del Estadio Jalisco con la firme intensión de buscar el boleto a las semifinales del campeonato, objetivo que evidentemente no llegó. Los dirigidos por Javier Aguirre se toparon con un Atlas intenso, sereno, y bien ordenado. El momento anímico pertenecía para los locales gracias a la euforia plasmada en la tribuna y que, fue evidenciada en la cancha durante los primeros minutos del partido.
El equipo tapatío mostró más gallardía y determinación de ir hacía el ataque durante el primer tramo del cotejo. Fue en el minuto 15 del tiempo corrido cuando llegaría la polémica mediante una ‘falta’ de Erick Aguirre sobre Luis Reyes dentro del área Rayada, infracción que sería sancionada como pena máxima. Julio Furch puso el primer tanto del encuentro en una jugada que claramente no era penal.
Aunado a las desatenciones y cuestionables decisiones arbitrales, La Pandilla no pudo generar ninguna importante frente al arco de Camilo Vargas en los primeros 45, salvo un cabezazo de Alfonso González que atajó bien el cancerbero rojinegro.
Para la parte complementaria Rayados sería el mandón, donde tras varios intentos que no llegaron a su destino, el gol cayó al 73′ gracias a un centro preciso de Maxi Meza para Poncho González que no perdonó. En dicha acción González resultó lesionado y tuvo que salir de cambio por el colombiano Duván Vergara que, poco se vio en el cotejo.
Finalmente, después de 17 años de sequía, La Academia está instalada en las semifinales del torneo, gracias a la excelente labor realizada en la campaña regular que hoy lo tienen como 2do de la tabla (primero en Liguilla tras la eliminación de América). Su próximo rival serán los Pumas, equipo que justamente enfrentaron en aquel 2004.
Para Rayados, solo queda irse de vacaciones y planear mejor el próximo semestre donde también disputarán el Mundial de Clubes…