Por Alfonso Espinosa | Twitter @Alesp_19
Sin duda alguna uno de los nombres que más ha sonado en las mesas de debates sobre el fútbol mexicano en las últimas semanas ha sido el de Javier Aguirre Onaindí, actual técnico de los Rayados del Monterrey, lamentablemente para él, esto no representa un aspecto positivo en su reputación, pues muchos aficionados y medios de comunicación consideran que el “Vasco” ya no tendría nada que estar haciendo como DT de la Pandilla.
A pesar de los malos resultados dentro de la cancha, la polémica principal se concentra en sus declaraciones y su forma de pensar acerca del momento actual del equipo.
“Falto de autocrítica” y “conformista” son algunos de los adjetivos que se utilizan para referirse a la figura de Javier Aguirre como técnico rayado, y aunque parezcan un tanto exagerados, la realidad es que algunas declaraciones de parte del ex-entrenador del Atlético de Madrid sí han dejado mucho que desear.
Tras la dolorosa derrota en el Mundial de Clubes vs Al-Ahly se esperaban ciertas declaraciones de Aguirre tratando de calmar las aguas y pidiendo perdón a la afición que hizo el viaje o apoyó desde su casa, sin embargo, todos nos sorprendimos al ver que lo que comentó Javier fue lo siguiente: “Hemos hecho lo mismo del pasado, tampoco es que haya sido la peor actuación de la historia del Monterrey”.
Si bien se puede entender la intención principal del mensaje, la cual es minimizar el fracaso, no hay forma lógica de comparar la participación del club en el Mundial de clubes del 2022 con las de años anteriores, pues claro está que los contextos son claramente distintos.
Ahora bien, la polémica por la forma tan peculiar de ver el fútbol por parte del estratega rayado no solo ha sido objeto de crítica reciente, ya que desde aquella eliminación del pasado 27 de noviembre en el Estadio Jalisco ya se había dejado claro esto debido a sus opiniones en la conferencia de prensa posterior al juego, mismas en donde este argumentaba que no tenía plantel suficiente para pelear por cosas importantes.
La realidad es que mientras el Vasco continúe en su puesto de entrenador con el equipo regio, este tipo de declaraciones seguirán presentes en cada uno de los resultados negativos que se obtengan bajo su mando, y como aficionados no nos queda más que seguir exigiendo buenos resultados para que poco a poco no haya necesidad del técnico de tener que defender un fracaso más que evidente.
