Los Guerreros del Santos Laguna consiguieron su segundo triunfo en calidad de local. La escuadra del aún interino Eduardo Fentanes logró golear a los Xolos de Tijuana con un marcador de 4 a 0 en la cancha del TSM.
Un partido con pocas emociones, pero sí con la puntería fina de los guerreros que no tuvieron problema alguno para ganar.
Hubo novedades en la escuadra lagunera; Brian Lozano no inició el encuentro, esto por su bajo nivel y que no ha sido del agrado de la afición, no ha sido el referente en ataque y este encuentro lo inicio sentado en el banquillo
Un equipo de Tijuana que los primeros 15 minutos tuvo un mayor control del esférico, sin embargo, no pudieron concretar las jugadas.
Santos ganó en casa y sumo 3 puntos importantes que ahora los pone en sitios de repechaje.
Pero esta jornada estaba llena de intriga, estaba llena de “curiosidad” por saber como sería la “nueva normalidad” en el TSM.
Un estadio diferente, un lugar parecido a un partido de tenis en donde el silencio es partícipe del encuentro. Un futbol sin barras o grupos de animación; un partido donde no hubo trompetas ni tambores, gritos ni brincos en las gradas; un futbol donde las escasas expresiones de algarabía aparecían cuando el local pisaba el área.
Un estadio con cerca de 10 mil personas de las 30 mil que su capacidad permite. Se sentía la tensión, se sentía como los elementos de seguridad te observaban, se sentía como
el helicóptero de las corporaciones policiacas volaban cerca del suelo como diciendo “Estoy presente”.
Se sentía, la agonía de la esencia del futbol, se sentía como si asistir fuera un trámite; pero algo NO se sentía… su gente.
Así fue este partido, así fue esta jornada, así será nuestro nuevo futbol mexicano.
