Por: René Fernández | Twitter: @Renefdz
Tigres se metió a la cancha del campeón Atlas y salió de ella humillado y prácticamente eliminado, pues solamente un milagro podría salvarlo el próximo sábado de un nuevo fracaso.
El equipo goleador que a medio torneo ilusionó a los incomparables es cosa del pasado, en la actualidad los del “Piojo” han marcado dos anotaciones en sus últimos seis juegos. El fin de semana ocupan tres para avanzar. Misión imposible.
Y para que la cuña apriete, fue el ex felino Julián Quiñones quien clavó el 3-0 del Atlas con un golazo que hizo explotar el Estadio Jalisco en la recta final del juego.
Antes habían aparecido en el primer tiempo Julio Furch para abrir la cuenta desde el manchón de los 11 pasos y posteriormente en la parte complementaria el “Hueso” Reyes quien también festejó su gol.
Erráticos en sus pases, desconectados, partidos, así se vieron unos Tigres hasta el minuto 70 del juego pues después de ahí mostraron una leve mejoría pero no les alcanzó para hacerle daño a la mejor defensa del torneo y a un Camilo Vargas que sigue intratable.
El próximo fin de semana los del “Piojo” van por una hazaña ante unos zorros que hoy más que nunca sueñan con el “bi”.
