Por: René Fernández I Twitter: @Renefdz
Con la llegada de Fernando Gorriarán a las filas de Tigres, ya son 23 los futbolistas uruguayos que han defendido la piel felina, algunos dejando una huella imborrable en la historia del equipo y en el corazón de los incomparables, algo que seguramente buscará emular el nuevo refuerzo auriazul.
Si hablamos de charrúas con un legado glorioso como felinos no podemos dejar de nombrar a Walter Daniel Mantegaza y Roberto Gadea, integrantes del primer equipo campeón de liga en la temporada 77-78 contra los Pumas.
En época más reciente, Egidio el “Cacha” Arévalo, de sangre uruguaya logró levantar el título en el 2015, curiosamente también contra los unamitas, además de haber jugado en ese mismo año la final de la Copa Libertadores de América.
Otro charrúa muy querido por la afición felina es Robert Dante Siboldi. A este arquero le tocó descender con el equipo, pero su garra fue fundamental para el rápido regreso a la máxima categoría, sin olvidar que le tocó levantar el trofeo de la Copa Mx en 1996.
Él no jugó, pero se encargó de guiar al equipo a la conquista de sus primeros dos títulos de Liga. El técnico Carlos Miloc Pelachi fue otro hombre uruguayo que dejo un legado imborrable y al cual se le sigue recordando como el creador del perfil Tigre.
Los últimos dos uruguayos en llegar al equipo fueron Nicolás López y Leo Fernández, este último ya no está, pero el “Diente” aún sigue y ahora tendrá a un nuevo paisano que también buscará dejar huella en su etapa como felino.