Por: René Fernández I Twitter: @Renefdz
Con el rosario en la mano, dramatismo y mucho sufrimiento, Tigres consiguió avanzar a los cuartos de final en el Torneo de la Concacaf al empatar 1-1 contra el Orlando City.
Gracias al gol de visitante anotado por Sebastián Córdova al minuto 20 del primer tiempo, los felinos siguen vivos en el torneo internacional.
Córdova recibió un pase de Jesús Angulo el cual bajó de pecho dentro del área y con un zurdazo venció la meta de Pedro Gallese.
El arquero peruano fue factor para que el marcador no fuera más abultado a favor de Tigres con al menos 6 atajadas claves a lo largo del partido.
El “Chima” Ruiz sorprendió colocando a Fernando Gorriarán detrás de Nicolás Ibáñez y a Córdova como volante por derecha, movimiento con el que al uruguayo se le vio mucho más peligroso a la ofensiva.
La presión de los Leones fue en aumento, Tigres se replegó y ahí lo pago caro.
Corría el minuto 89 de acción cuando Ercan kara con una tijera mandó el balón al fondo de las redes.
Los locales ocupaban uno más para avanzar y siguieron arrinconando al plantel felino que se quedó con 10 hombres con la expulsión al 95 de Samir Caetano por doble tarjeta amarilla.
En la última jugada del partido seguramente el aliento se le fue a la afición felina cuando Nahuel Guzmán no pudo despejar un centro, dejó el balón en el área y McGuire realizó un disparo que pasó por encima de la meta del “Patón”.
Tigres se cansó de fallar, terminó colgado del poste pero logró el objetivo y ahora apunta al Clásico Regio.
La pregunta es, ¿Jugando así podrá ganarle a Rayados?