Los primeros partidos de Ida de Semifinales han dado un giro de 180º al pronóstico anticipado. Incluso, esta vez, las súper líderes del campeonato han tenido que ceder a la inercia volátil del juego. Resultados sorpresivos, una agenda cuestionable y la incógnita de unos partidos de vuelta por disputarse, han hecho de esta fase final una ruleta de emociones.
Sin público, en el Estadio Jalisco, Alison González ha recibido el Balón de Oro. Reconocimiento que, para una gran parte de la afición, ameritaba una ceremonia mayor, en la que estuviera acompañada por la afición rojinegra, que justo ahora es la única capaz de celebrar dos títulos para finalizar el año. Un sueño que cada vez parece más factible gracias a la propia goleadora pues, “Aligol” fue la encargada de abrir el marcador con el único tanto del encuentro. Las de Eva Espejo siguen sin ganar en Liguilla aun con una propuesta ofensiva y clara. Parece que, después de todo, Rayadas no pudo mantener la regularidad, y éxito que aquello supuso, del torneo regular. Dos empates y una derrota son el balance de Monterrey, quien parece ahora un equipo sin referente fijo en el ataque. Fuera de Monsiváis, el área chica parece desierta de ofensivas rayadas, razón por la que los pases a profundidad, centros y duelos por las bandas, concluyen en nada.
Quizá esto lo quieran leer dos veces: América venció a Tigres – repito, América venció a Tigres -. En efecto, contra toda suerte, lógica o predicción, las Águilas han logrado hacer del Azteca un nido impenetrable en esta liguilla. No hablamos de un juego brillante, sino de un juego rápido, sólido y efectivo. El dos a uno en favor de la azulcremas, refleja lo que ha sido un partido atípico, en el que las Amazonas, de manera sorpresiva, no han podido penetrar en el área rival con la eficacia de partido pasados. Durante la segunda mitad, Dani Espinosa recordó a la afición su figura de ídolo, marcando el camino hacia otra posible final. Posteriormente vino Luebbert, que ha elegido la liguilla para lucir como goleadora. De lado de Tigres, Mayor logró reducir la ventaja, para resolverlo todo en el Volcán. Como locales, el equipo de la UANL tiene grandes posibilidades de remontar, pero, enfrente, las ilusiones de América podrían ser mayores.
Aparentemente, la Liga MX Femenil aún guarda sorpresas, que resultarán más gratas según los colores que se vistan. Sin embargo, para la afición en general, los resultados inesperados pueden sumar emoción, incluso nervio, a lo que pueda ser una final inédita en el futbol. Monterrey y Tigres tienen en sus manos la última palabra como locales, pero, Atlas y América, también tienen voz en esta conversación, con una intervención protagónica.
