POR: DIEGO DE MONTEMAYOR
Los goles, los campeonatos, los momentos de gloria son importantes para cualquier jugador o jugadora, pero nada se compara con el amor verdadero…así es la historia de la delantera australiana Rhali Dobson, quien abandonó el fútbol profesional de su país natal para cuidar de su novio, quien fue atacado por un cáncer cerebral en los últimos meses.
Después de tres años jugando para el Melbourne City la jugadora decidió hacer un alto en su carrera como futbolista profesional, ya que su novio entrará a un largo proceso de 12 meses de quimioterapia tras ser sometido a una intervención quirúrgica tras presentar un cáncer cerebral.
Dobson, de 28 años, tuvo su último partido en una noche que pareció estar escrita por un director de cine: anotó gol, le dio el triunfo a su equipo por 2-1 frente al Perth Glory y cuando concluyó el partido recibió una argolla de compromiso de parte de su novio.
Tan pronto y el anillo de compromiso salió del bolsillo de su pareja y todas sus compañeras corrieron para abrazarse con ambos, en una imagen que le dio la vuelta al mundo.
“Esto es más grande que el deporte. Él es mi mundo absoluto. Mantuve las cosas bastante tranquilas porque quería que se mantuvieran enfocados en asegurarnos de que tuviéramos un buen final hasta el final de la temporada”, declaró Dobson para ESPN.
El adiós de Dobson se convirtió en una historia de amor que es tema de conversación en todo el mundo.